Discreto setlits con exceso de temas de su Frozen Tears of Angels (2010) y The Dark Secret (2004) junto a un olvido absoluto del decepcionate Triumph Or Agony (2006). Sus singles míticos correpondientes a los discos de su primera etapa -Legendary Tales (1997), Symphony of the Enchanted Lands (1998), Dawn of Victory (2000) y Power of the Dragon Flame (2002)- sonaron cuando el respetable los necesitaba y las partes 'enlatadas' no incordiaban en absoluto a la hora de corear los himnos de este grupo italiano que se reconcilia con el directo en esta sala tras el fiasco de hace 11 años cuando acudieron por primera vez a España como teloneros de Stratovarius junto a Sonata Arctica.Tal vez fuesen las ganas de ver en directo a Rhapsody of Fire lo que hizo de verdad especial un concierto tirando a normalito (con la sala a tres cuartos de su capacidad) donde la banda no se salió del guión y el público respondió con energía en cada una de sus andanadas powermetaleras.
\m/o_-\m/
3 comentarios:
pero mejor o peor que el de hellowen y stratovarius?:P
:D
Yo me lo pasé teta. El público súper entregado, habría preferido más clásicos claro, pero me gustó.
Y la orquesta que habitaba el Mac sonaba a gloria XD
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