El grupo de Folk Power Metal vira su sonido hacia paisajes más extremos y adopta poses y dejes de blockbusters juveniles como Children Of Bodom o referencias de los veteranos Inflames post Clayman sin dejar de lado el regustillo a Scyclad de anteriores grabaciones.
Y a pesar de que podría sonar a lo más artificial y comercial posible, este giro musical les coloca en una situación inmejorable. Los 11 temas del disco desprenden fuerza y brutalidad. Riffs y melodías revientatímpanos y unas composiciones con violines y acústicas tremendas.
Si bien es cierto que predomina el material puramente heavy los añadidos extremos de los que hacen gala o los repentinos y brutales cambios de registro son totalmente meritorios. Puede que este trabajo sea tomado por algunos como un acercamiento a territorios más comerciales dentro del mundo metálico, pero si se toma como un paso más dentro de una prometedora carrera se convierte en un gran descubrimiento.
Crítica publicada en Rock Hard España nº 13
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