Melodías, personajes, ambientaciones, magias, hechizos, todo procede de la saga madre. Son innumerables las veces que nos detendremos ante un elegante guiño introducido por el equipo de programación y por Toshiyuki Itahama, el diseñador que se ha marcado la estética adorable de toda la entrega. El crescendo épico se agradece en un producto de estas características (que podría limitarse a ofrecer combates en mazmorras y poco más) y a las pocas horas nos vemos inmersos en una agradable aventura que apetece recorrer de un tirón.
Pueden leer mi reseña completa en Fanzine Digital
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3 comentarios:
ya sabes que opino yo de estos juegos...
Que ganas
ya te comento que este me ha parecido muy digno, sipe, muy abrazables, como dices tú
el chocobo tales, es la hostia, no se si tubiste oportunidad de jugar, lo tengo y si quieres te lo paso.
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