Estos mosqueteros desprenden aroma a Assassin´s Creed y a The Authority. Le da a los personajes de Dumas finales molones y frases destronciantes. En definitiva, hace de una historia que ya es universal (y por tanto, de todos) una revisión macarra y entretenida, dejando que cada intérprete se quite espinitas clavadas en anteriores sagas y luzca su lado más gamberro entre escenas de acción y secuencias imposibles que dibujan un siglo XVII colorido, ingenuo, maravilloso.
miércoles, 12 de octubre de 2011
Los tres mosqueteros (2011)
Paul W. S. Anderson es uno mis cinematógrafos favoritos por sus aciertos visuales y preciosa fotografía, así como por su elegante composición de planos y estética exquisita, abigarrada, delirante que, sobre todo, está imprimiendo en sus últimas cintas.
Estos mosqueteros desprenden aroma a Assassin´s Creed y a The Authority. Le da a los personajes de Dumas finales molones y frases destronciantes. En definitiva, hace de una historia que ya es universal (y por tanto, de todos) una revisión macarra y entretenida, dejando que cada intérprete se quite espinitas clavadas en anteriores sagas y luzca su lado más gamberro entre escenas de acción y secuencias imposibles que dibujan un siglo XVII colorido, ingenuo, maravilloso.
Estos mosqueteros desprenden aroma a Assassin´s Creed y a The Authority. Le da a los personajes de Dumas finales molones y frases destronciantes. En definitiva, hace de una historia que ya es universal (y por tanto, de todos) una revisión macarra y entretenida, dejando que cada intérprete se quite espinitas clavadas en anteriores sagas y luzca su lado más gamberro entre escenas de acción y secuencias imposibles que dibujan un siglo XVII colorido, ingenuo, maravilloso.
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2 comentarios:
Me sorprende como sigue la historia original del libro y lo mezcla con steampunk en estado puro.
De lo mejor que he visto este año.
Una en la que coincidimos!
;)
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