jueves, 8 de diciembre de 2011

Restless

Gus Van Sant hace trampas (siempre las hace) ¿Quién desearía ver muerta a esa carita de ángel sentenciada desde el minuto uno de la cinta? Disfrazando a los personajes con estética hipsteriana vintageoide (pero que salgan guapos y que el público moderno los haga propios) y añadiendo cuatro gotas de estilo Robert Mckee al guión de Jason Lew (risas + lágrimas, risas + lágrimas, risas + lágrimas) la película deshidrata al espectador a base de llorera constante. Danny Elfman pasaba por ahí regalando un par de partituras a lo Yann Tiersen. Y las historias secundarias apenas importan, hasta que se resuelven, emocionan y te dejan con cara de tonto, hinchado. Bobo. Y Blando.

4 comentarios:

carolina dijo...

Pues a mí me dejó bastante fría: lo único que me emocionó fue la canción de Nico que suena al final, pero porque esa canción siempre me deja los pelos de punta. Una de las pelis más flojas de Van Sant. Para mi gusto, claro. :)

Samu dijo...

NO TIENES CORAZON!
XD

Samu dijo...

A mi hasta me molo su Elephant. LOL.

carolina dijo...

¿Que no tengo corazón? ¡Si cada vez que veo 'Last Days' me quedo hecha polvo! Y me encanta 'Elephant'... :P