MUD

La considero uno de los estrenos del verano a tener muy en cuenta. Me ha dejado clavado de principio a fin. Tiene ese toque épico a lo Un Mundo perfecto y a la vez la melancolía dramática de Mistic River, ambas del maestro Eastwood, pero habla con su voz propia y obliga al espectador a completar muchos silencios incómodos.

Apenas conocemos las motivaciones y sucesos pasados de los personajes, es a través de lo que sucede y cómo lo interpreta la pareja protagonista, que vemos como encajan las piezas del puzzle. Quedarse en la misoginia nada velada de los personajes motores es hacer no solo una lectura superficial del trabajo, sino que implica no entender de qué va la verdadera historia de cambio del niño que hila la trama, en el que cada golpe de realidad siempre es asestado por los personajes femeninos.