Misión: imposible - Nación secreta

Christopher McQuarrie, con solo tres cintas en su currículum (una de ellas la impecable Jack Reacher) y varios guiones de indudable calidad, firma y dirige la quinta entrega de Mision Imposible y ofrece la cinta más sólida de la saga desde el acercamiento de Brian de Palma al cine de espías combinado con la acción espectacular. Los dos primeros actos de Nación Secreta entroncan con los sucesos narrados en Protocolo Fantasma, dando coherencia interna a las aventuras de Ethan Hunt (ya correlacionadas desde la tercera parte de JJ) y se reservan el lujo de mostrar en ellos las escenas más espectaculares del film. Es en el tercer tramo donde la cinta se desmarca de lo visto anteriormente y regala un acto final magistral sin más artificios que las interpretaciones del elenco protagonista y un estupendo clímax a mano de dos de los secundarios. Desde luego, esto SI es cine de acción del que vale la pena.