
Se puede reducir, como comentaban por esta casa, la película en las frases 'Papá, hemos llegado?' 'No, continúa andando', pero entonces no se le haría justicia a esta fábula deshumanizante en la que la fe en el ser humano brilla por su ausencia.

Con Lasseter en la producción Disney recupera sus grandes cintas en 2D. Diseños protocolarios, situaciones mil veces conocidas, números musicales bien conseguidos (cambiando el estilo de animación, todo un acierto) y un final un tanto bizarro.

Alma de telefilme con factura de superproducción. Fotografía estupenda, secuencias oníricas apabullantes, cámaras distorsionadas al estilo serie B, alguna secuencia gamberra (la escena de tensión en la casa es coña pura) y un desenlace nada satisfactorio con el que Peter Jackson se hace la picha un lío (¡Atención a los plagios de la BS al score de Sunshine!)