Puedes escucharlo en este enlace.
Con los caninos pude hablar de autogestión (en referencia al modelo de Rantifuso) pero también de los procesos colectivos que muchos fanzines hemos realizado para dignificar y defender los espacios en grandes salones y el por qué deben mantenerse: no perder lo conseguido por otros antes y mejorarlos de cara a los que vengan.
También se tocaron temas como las sensibilidades políticas en el mundillo, afinidades, procesos de trabajo, grupos de autoedición que funcionan como autodistribuidoras, de márgenes y de fagocitación y de muchas otras cosas relacionadas con los fanzines en una mesa donde hubo voces muy dispares pero una muy agradable sintonía (y por supuesto, birra).
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