Thor: El mundo oscuro

Marvel Studios ha planteado Thor 2 (Thor: El mundo oscuro) como la presentación de su propia space opera en la que mover a sus personajes cósmicos, realizando un segundo acto a lo El Imperio Contraataca sembrado de geniales momentos hilarantes que hacen que las dos horas de bofetones y traiciones se pasen en un suspiro. La constante frustración que provocan las escenas y acciones de Loki (Tom Hiddleston se hace con la película en los tramos en los que su personaje es necesario) solo son superadas, otra vez, por la presencia de los secundarios que tan bien funcionaron en la primera parte. Hay que reconocerle el mérito a Chris Hemsworth de haberle visto por fin la chorrada al asunto, -una chorrada de mucho dinero y que genera cuantiosos beneficios para Disney/Marvel- dotando a 'su Thor' de un halo constante y divertido, como el que mejor lucía en la entrega original y en los gags de Los Vengadores.