Viví con tremenda decepción el nacimiento de Podemos, que para mi fue la puntilla definitiva en mi inmersión en esta aventura. La primera fue cuando un grupo de 'representantes' del 15M coordinaron, sin conocimiento de muchas asambleas, una reunión con representantes políticos alemanes. Ahí vi que algo no estaba funcionando al menos con como yo lo sentía.
Desde el primer día muchos pidieron un partido y desde el primer día defendí que solo haciendo presión desde fuera (pero con aliados dentro del sistema, NO un partido) se podían hacer cosas, presión. Cambio.
Supongo que 'el vamos despacio porque vamos lejos' agotó a muchos de los más firmes defensores del NO institucional (y todo el mundo está en su derecho de no mantenerse en una postura si cree que es la equivocada)
Acciones como 'los rodea el congreso y demás' solo me parecía que nos convertían en carne de cañón para los antidisturbios y para hacer la foto.
A veces pensaba que quienes lanzaban las convocatorias lo que buscaban era alguien con la cabeza abierta, en coma o muerto para crear una chispa que no se podía repetir ya, es decir, lo que nos hizo reunirnos en las plazas aquellas semanas de Mayo.
Fue algo irrepetible de lo que todos aprendimos, pero algunos pensaron que los detonantes pueden repetirse.
Y creo que la Historia ha demostrado que no, que por mucho que planifiques, todo sale como menos esperabas.
He vivido un tremendo proceso de cambio interno y he visto como también cambiaba la gente. Os he visto cambiar a muchos de vosotros -para bien, desde mi punto de vista-
He aplicado metodologías que conocía a proyectos con personas que no sabían y he aprendido muchísimo de otras que me regaló el 15M y de las personas con las que viví experiencias Buenas, Malas, Regulares. De todo tipo.
(Primera Asamblea popular en Malasaña, una de las más activas y con la que me impliqué y trabajé durante dos años)
He convivido con personas que solo iban a lo suyo y puede que otras pensasen lo mismo de mi. Es normal, roces y gestiones humanas. Siempre he querido dar el brazo a torcer pensando en lo mejor para lo común, hasta que el corazón me dijo que no debía seguir ya que entonces pasaría de la decepción a otro tipo de sentimiento más nocivo. Pero sin duda brilla en mi el sentimiento de haber trabajado con bastantes personas maravillosas -todas con sus peros, porque nadie es perfecto-
Y me siento feliz de haber participado de las acampadas y de sus asambleas y de mantener activa una red tan grande de gente estupenda con las que sé que el viaje que empezó, y que como dije una vez 'es para toda la vida', puede continuarse convencido de que se lograrán cambiar muchas cosas si no se desactivan los movimientos sociales.
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Dejadme estar un poco triste al menos, me bajé del 'velero activo' por todo lo que os cuento y aún desde tierra, y sabiendo que todas las personas seguimos siendo bienvenidas a bordo, veo que el viento sopla en tantas direcciones ahora mismo que ni con una brújula encontraríamos el punto al que queremos llegar del mapa.
Es más, creo que se nos olvidó marcar el destino, y eso,reconozco que en cierta manera, sigue siendo excitante.
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